ENSALADA FREAK | La bruja viene por ti

[Sección coordinada por David A. Becerra*]

En ocasiones, voy a ver alguna película que por alguna extraña razón la vox populi odia o pasa desapercibida, y me encuentro con una producción con cualidades y características que me parecen relevantes; en otras ocasiones, ocurre lo contrario…, por ejemplo, con esta película de reciente estreno: The Witch, (Dir. Robert Eggers, 1983). Opera prima de un joven director que tuvo una recepción muy buena con la crítica y ha generado muchos comentarios y análisis. 

Lo primero a destacar es su reducido presupuesto de un millón de dólares, muy ínfimo para los estándares de Hollywood; la película aprovecha cada centavo de ese dinero para llevarnos a una ambientación de época muy convincente. La historia está situada en el año de 1630, en una colonia inglesa de Nueva Inglaterra que ha llegado al nuevo continente con la idea de establecer una nueva y próspera vida; el padre de una de estas familias puritanas tiene su propia idea sobre la religión cristina y se hace expulsar junto con su esposa e hijos de la seguridad de la empalizada de la colonia, dirigiéndose a la profundidad del bosque donde se encuentran con entidades sobrenaturales que los atacan sin razón aparente. 

La cinta es muy efectiva, logra una atmósfera triste, oscura y llena de superstición que podríamos imaginar muy acorde a la religiosidad y mentalidad de las personas del siglo XVII, donde la creencia en Dios, el diablo, la brujería y las maldiciones eran tan reales como la tierra que cultivaban o la madera que cortaban. 

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No le quito méritos a esta película, sin embargo me parecen apresurados los comentarios que la posicionan como la mejor película de terror del año (ni siquiera vamos a la mitad), o el pináculo del cine del terror que desde esa cima, lo único que se puede esperar es su inexorable caída; un poco exagerado a mi manera de ver, ya que aunque es verdad que la cinta no recurre a las referencias cinematográficas del cine de brujas, hay que agregar que no hay muchas buenas (o ninguna), porque todas van desde lo olvidable como Tiempo de brujas (2011), las aventuras adolescentes como The Craft (1996), las comedias como Las brujas de Eastwick (1987) o La maldición de las brujas (1990), hasta las series de televisión como Bewitched, (Hechizada, 1964 – 1972) y Sabrina, the Teenage Witch (Sabrina, la bruja adolescente, 1996 – 2003).

The Witch recurre más bien al terror psicológico, a la austeridad de la imagen y al compromiso con el espectador para dejarse llevar por el relato; serían referencias más cercanas a esta producción The Blair Witch Project (1999), Lovely Molly (2011) o, incluso, Rosemary's Baby (1968); y también un filme muy antiguo que para mí es el mejor sobre el tema: Häxan: Witchcraft Through the Ages (1922), producción del cine mudo del director Benjamin Christensen, que es a la vez ficción y documental; también hay que decir que retoma la historia construida (y no muy apegada a los hechos históricos) sobre el culto a la brujería, muy al estilo de los cuentos de hadas que asocian esta religión con el satanismo y los elementos esperados en él, como machos cabríos, cuervos, sacrificios humanos o la teriantropía (habilidad de una persona para transformarse en animal). 

Les recomiendo verla, diciendo que es buena, sin exagerar, sin darle cualidades mágicas o extranaturales, ya que con las que nos proporciona The Witch es suficiente.  

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David A. Becerra

PlasmArte Ideas, mayo, 2016

FB: PlasmArte Ideas

Twitter: @plasmarteideas

  

Ensalada Freak es coordinada por David A. Becerra

[*Cocinero de primera, perdón de primer año, 

experto en revolver cosas sin un orden específico, 

se me encargó la elaboración de ensaladas y otros platillos. 

Tengo la intención de escribir varios libros,

 de cursar varios diplomados, algunas maestrías y un par de doctorados, 

 hablo más o menos español, y lo escribo al 50%;  

soy el fundador y único miembro de mi propio club de Star Wars.]

Contacto: davidalfonsobecerra@gmail.com