viernes, 24 de febrero de 2017

MOUSSE MEDIA | Colaboración especial - Cine & Amor: Tres pasos para sincronizar en pareja


[Sección coordinada  por Víctor D. Magallón*]











                                                               
                                                    [Colaboración especial de Ivonne Solano]





“Me basta mirarte para saber que con vos me voy a emparejar el alma”. 
Julio Cortázar 



Con afecto para M. Roldan L.




Cerrar ciclos y abrir nuevos, muerte y renovación, invierno y primavera, frío y calor, yin & yang… Recordar aquella noche en que coincidimos por primera vez y me dijo: “el ser diferentes o tener gustos diversos no impide que dos personas estén juntas”, palpar el significado de las palabras y dejarse envolver en un ambiente racional donde el compartir va más allá de ideales y que da lugar a algo místico y profundo a lo que Einstein define como la acción fantasmal a distancia. 

Lograr la perfecta correspondencia temporal implica un vals al estilo de Carl Jung, el baile de dos personas pasa a un plano fantasmagórico pues en realidad bailan cuatro, ya que la mujer se acompaña de animus que es la idea que ella tiene de él, mientras el hombre convive con anima que es la idea que él tiene de “ella”. Por un lado nos conduce en la búsqueda de aquella alma que se le parezca o que en ocasiones cumpla una imagen personal; o a querer cambiar a la persona en semejanza a la idea. Tres sencillos pasos fílmicos serán nuestra guía para sincronizar.


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Uno-YANG

I´m Here (2010) Dir. Spike Jonze

Explorando de una manera sensible, más allá de las posibilidades humanas, los afectos al estilo All is full of love de Björk, la relación entre dos robots hace que a veces una lágrima salga emocionada ante una explosión sentimental de sinceridad, comprensión, entrega, confianza, conviviendo con un lenguaje relativo e inspirador.

La clave sin duda es reconocer las piezas firmes, únicas y completas que nos constituyen como individualidad de manera que uno no necesita iniciar una búsqueda de piezas en el otro para cubrir las faltantes. Jonze nos demuestra que es posible procurar a nuestra pareja aunque es necesario saber los límites de nuestras posibilidades. El afecto va directo al extremo de YANG, acompañando la secuencia visual con un emotivo soundtrack que va hilando cada imagen desde el inicio al final.  


Fotograma
 

Dos-YIN

The Lobster (2015) Dir. Yorgos Lanthimos

Una ópera sarcástica que juega con los extremos de vivir en pareja y la soltería, en donde la perspectiva no permite mediar, o es azul o es amarillo, pero si tomamos ambos colores surge un resultado exquisito al contemplar dos elementos que al incorporarse hacen una nueva tonalidad. Disonancias que son necesarias de identificar y regular para crear un ambiente propicio entre dos personas; apego, miedo, inseguridad, juegos de poder, pero ante todo la estabilidad personal en todos sus sentidos. Nick Cave recorre fragmentos sonoros de situaciones alentadoras y emotivas que capturan la esencia de “acompañar” el sencillo acto de untar pomada en lugares determinados que uno no puede alcanzar por sí mismo. 

La clave para este paso dos es el respeto a uno y al otro, el uso de lenguajes afectivos que nos permitan entender y expresar a quien nos acompaña, el “yo” compartido con una guía mutua que al dar play pueda sincronizar. 

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Fotograma


Tres-YIN/YANG

Sabrás que hacer conmigo (2015) Dir. Katina Medina

Ciclos, equilibrio y dualidad ayudan a percibir el amor de una manera profunda, saber que todo tiene un inicio y un fin permite disfrutar cada momento del presente. Concebir la intimidad más allá de la actividad sexual por ejemplo; al dormir juntos y sentir abrazos con los dedos de los pies, soñar con él/ella y al despertar encontrar su presencia a tu lado, dar y escuchar palabras de aliento y motivación, encontrar momentos para estar uno a uno, pequeños detalles que alegran el alma, cuidar de sus plantas, llevarle para cenar su pieza de pan favorita, en resumen abrir las puertas de la confianza. 

Todos los canales sensoriales son abordados por la música de Juan Castelazo que junto a acordes de guitarra hace vibrar el alma. 

La clave final para poder sincronizar es que es necesario que cada uno se encuentre en contacto consigo mismo y a su vez en contacto con el otro. Un efecto de introspección que permita reconocer en nosotros la sombra y la luz/ yin-yang.

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Fotograma.



Ivonne Solano
ivonnexd@gmail.com
PlasmArte Ideas, febrero, 2017

FB: PlasmArte Ideas
Twitter: @plasmarteideas










*Mousse Media, es coordinada por de Víctor D. Magallón

[Cafeinómano y fiel defensor del código de los caballeros pizza. 
Gusta de realizar sesudos análisis en busca de la última temporada de 
Los Simpson que haya valido la pena.] 

Contacto: victor.dmagallon@gmail.com







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